BICENTENARIO: VIDA Y OBRA DE MELCHOR OCAMPO

“Muero creyendo que he hecho por el servicio del país cuanto he creído en conciencia que era bueno”.

He dedicado la entrada del blog a la vida y obra de un personaje de la historia mexicana:

José Telésforo Juan Nepomuceno Melchor de la Santísima Trinidad nombre con el que fue bautizado

MELCHOR OCAMPO

Sabemos y reconocemos la parte de la historia que a todos nos han contado o lo que en la escuela nos han hecho saber, pero pocos o muchos de los que ahora estamos inmersos en las tantas y tantas reformas por las que esta atravesando el país del siglo XXI, nos ha preocupado el saber un poco sobre lo que realmente aconteció cuando las ideas libertadoras se pronunciaban para acabar con las distintas formas de discriminación, explotación y tiranía que sometían a todos los pobladores en la época antes de las Leyes de Reforma.  


Según la historia cuenta que terminada la Guerra de Reforma los liberales triunfaron sobre los conservadores y fue entonces cuando Melchor Ocampo rechaza todo cargo en la nueva administración de la República Mexicana y se refugia en la hacienda de Pomoca para cultivar la tierra, vivir en tranquilidad y dedicarse a sus negocios.  Fue entonces que de manera brusca fue aprendido por el español Cajiga gente del General Leonardo Màrquez alias el Tigre de Tacubaya por las matanzas a los estudiantes de medicina que atendían a los heridos que resultaban de los enfrentamientos con sus tropas conservadoras y las fuerzas libertadoras de aquel entonces. Fue electo diputado en 1842, en 1846 fue gobernador de Michoacán enfrentándose a la invasión norteamericana.  Fue secretario de Hacienda en 1850. Uno de sus proyectos fue tan controvertido que causó un gran conflicto entre conservadores y liberales y fue obligado por el presidente Santa Anna a dejar el país. Se refugió primero en Cuba y luego en Nueva Orleans donde se encontró con otros liberales, entre ellos Benito Juàrez. En esta ciudad se dedica a la publicación de folletos para promover cambios políticos en México. El resultado de su esfuerzo fue el Plan de Ayutla (1855) para derrocar al dictador Santa Anna y llevar al poder al general liberal Juan N. Àlvarez. En el gobierno de éste fungió brevemente como ministro de Relaciones Exteriores. Durante el gobierno de Juárez fue nombrado ministro de Gobernaciòn, encargándose también de los ministerios de Relaciones, Guerra y Hacienda.

De esta época son las famosas Leyes de Reforma, que separaron la Iglesia del Estado, y de cuya redacción fue él uno de los principales autores. Estudió en el seminario de Morelia y después leyes en el colegio seminario de México (Universidad Pontificia). Trabajó en un bufete jurídico desde 1833. Viajó a Francia  en 1840 y ahí fue influido por las doctrinas liberales y anticlericales de la Ilustraciòn Francesa. Más tarde regresó a Michoacán para trabajar en su hacienda y dedicarse a la práctica del derecho y a la investigación científica sobre el campo catalogando la flora y fauna de la región y estudiando lenguas indígenas. Su colección de libros fue una de las mejores de México.  Participo tambien en el tratado Mc Lane-ocampo en el cual se establece formalmente  el Tratado de Tránsito y Comercio, fue un acuerdo entre los Estados Unidos y el gobierno liberal de Mèxico, encabezado por Benito Juàrez, firmado en el puerto de Veracruz en México, el 14 de diciembre de 1859, el cual habría vendido a perpetuidad el derecho de tránsito por el Itsmo de Tehuantepec a los Estados Unidos, por cuatro millones de dòlares, desde el puerto de Tehuantepec en el sur, hasta Coatzacoalcos en el Golfo de Mèxico, y con la carga para México de emplear fuerzas militares para la seguridad de las personas que transiten; ceder a perpetuidad el derecho de tránsito a favor del vecino país del norte, desde la ciudad de Guaymas hasta el Rancho de Nogales u otro punto conveniente de la frontera entre la República de México y los Estados Unidos; ceder a perpetuidad el derecho de tránsito a la unión americana, desde cualquier punto entre Camargo y Matamoros, u otro punto conveniente de la frontera de Tamaulipas, vía Monterrey, hasta Mazatlán. México mantenía su soberanía sobre los tres pasos y soberanamente podía modificar el tratado.  El 22 de febrero de 1859 William B. Churchwell recomendó de forma confidencial a James Buchanan que en el tratado se incluyera una cláusula para lograr la cesión de Baja California a los Estados Unidos, sin embargo el gobierno de Juárez rechazó la propuesta y en la versión final del tratado firmado por McLane-Ocampo no se vendía ninguna porción de territorio. La firma del tratado era de particular importancia para el gobierno de Juárez, porque representaba el reconocimiento de los Estados Unidos de América a su gobierno y de esta forma el gobierno liberal obtenía automáticamente el apoyo militar de EEUU.  Aunque el tratado McLane-Ocampo no fue ratificado, sirvió para que se reconociera al gobierno de Juárez y consecuentemente derrotar a los conservadores . El tratado estipulaba que todo el tránsito que circulara por el istmo, sería libre de cualquier derecho o tarifa, tanto para los productos comerciales como para los militares y las tropas. Incluso garantizaba la obligación de las tropas mexicanas de ayudar al aseguramiento de los derechos permanentemente otorgados a los Estados Unidos. Adicionalmente, garantizaba derechos de paso por dos franjas de tierra mexicana: una que correría por el estado de Sonora desde el puerto de Guaymas en el Mar de Cortès, hasta Nogales, en la frontera con Arizona; y la otra del occidental puerto de Mazatlàn, en el estado de Sinaloa, pasando por Monterrey, hasta llegar a Matamoros, Tamaulipas  al sur de la actual Brownsville, Texas, en el Golfo de México. El tratado no autorizaba la construcción de ningún canal. México tendría asimismo la obligación de construir instalaciones de almacenamiento en ambos lados del istmo de Tehuantepec. Todos los derechos de paso beneficiarían a los Estados Unidos de forma perpetua. De los $4,000,000 del costo total de estos beneficios, los Estados Unidos pagarían de inmediato únicamente dos millones al gobierno de México, mientras que la mitad restante permanecería en las manos de Estados Unidos, previendo los pagos de demandas de ciudadanos estadounidenses contra el gobierno mexicano por daños a sus derechos. El tratado establecía que en los puntos de tránsito siempre debería de haber presencia militar y que el país anfitrión (México) estaría encargado de militarizar la región y eliminar cualquier anomalía que impida un libre tránsito. En otras palabras México siempre mantenOcadría la soberanía de esos lugares y además lo mantendría militarizada por cualquier anomalía (como conflictos militares con el país norteño). Estados Unidos planeaba construir una vía férrea o un canal a lo ancho del istmo para acelerar el transporte de correo y mercancías entre las costas este y oeste. Los caminos ahí, en Nicaragua y en Panamà ya acumulaban tránsito considerable. Mediante este tratado lograría su beneficio, pero al mismo tiempo beneficiaría el comercio mexicano, aunque no de la mejor forma. Hubo criticas de:  Justo Sierra escritor liberal escribió: El Tratado o pseudo-Tratado McLane-Ocampo no es defendible y todos cuantos lo han refutado, lo han refutado bien, porque representó la constitución de una servidumbre interminable... Francisco Bulnes, Diputado y anteriormente senador liberal escribió que ...la marina de guerra americana (de Estados Unidos) hubiera arrojado a Juárez de Veracruz y hubiera dado el triunfo a la reacción. Los reaccionarios (es decir, los conservadores) sacrificaron sus intereses de partido a su aversión por vender territorio a los Estados Unidos...cosa que sí hicieron Juárez y los suyos con el tratado McLane-Ocampo. Josè Vasconcelos escribió: ...Juárez, en Veracruz, no estaba solo. Su metrópoli estaba en Washington, y hasta allí fue a dar un obsequio que los juaristas ofrecían a la gran República del Norte a cambio de su apoyo cada vez más urgente. Consta este obsequio en el Tratado McLane-Ocampo que, dice el mismo Justo Sierra, apologista de la Reforma, "otorgaba franquicias sobre el Istmo de Tehuantepec y parte de la frontera, que equivalían a un condominio". Y concluye diciendo (Sierra) que "Juárez y Ocampo se hallaban alucinados" al dictar ese documento. Que las nuevas generaciones consulten el Diccionario de la Lengua, cotejen la definición de alucinado con la de traidor, y resuelvan cuál es la que conviene al caso...


ITSMO DE TEHUANTEPEC


Melchor Ocampo nace en la Hacienda del Pateo en Michoacan el 6 de Enero de 1814, escribo esto en el marco del 6 de Enero del 2014, ya que se  celebró  el bicentenario de su natalicio en Maravatìo Michoacan donde las autoridades de gobierno y educativas organizaron el justo homenaje tras rendir honores al labaro patrio en el Teatro Morelos. El  orador ofreció una semblanza de la vida de quien en 1814, se recibiera  en la facultad de derecho en la Universidad de la Ciudad de Mèxico y estudiara también la física, la química y las ciencias naturales, entre otras disciplinas del saber.

Según uno de sus biógrafos más connotados, Manuel Payno, Melchor Ocampo fue un espíritu libre, receptivo, acucioso investigador de la botánica y amante de la vida en el campo; hizo de su propiedad, conocida como la hacienda de Pomoca, una finca próspera, donde floreció la agricultura y la ganadería. Hombre organizado, práctico, honrado, sabía vivir con holgura pero sin derrochar sus bienes. Liberal de corazón se unió a las causas de la Reforma y se convirtió en uno de los colaboradores más cercanos a Juárez, siendo uno de los redactores principales de las Leyes de Reforma, en especial la concerniente a la creación del Registro Civil y al establecimiento del matrimonio civil, donde su famosa “Epístola”, conocida como La Epístola de Melchor Ocampo, fue leída por más de cien años a quienes contraían matrimonio, hasta que los reclamos de género hicieron que se omitiera.

Su mayor felicidad, comenzó siendo un secreto. 

Se   avecinaba   un    escándalo, en 1839, cuando Ana María Escobar -nana, figura maternal y amante de Ocampo-    le dio la noticia de estar esperando un   hijo suyo. Para evitarlo,     él emprendió     un viaje a Europa y ella se fue a Morelia. Nació   una niña que  inmediatamente fue mandada  a un internado declarada   como   expósita y ahí comenzaron los primeros años de vida de la hija de Ocampo: Josefa   (llamada así en honor a la única persona que acompañó a Ana María,  su  criada    Josefa  Rulfo )   . 


Ocampo hacía visitas esporádicas a la niña, pero hubo un encuentro decisivo, un momento en el que decidió no dejarla jamás y su vida tomó color. Josefa tenía alrededor de diez años. 
Su hija “representaba el talento, la comprensión, la audacia, la amistad y el cariño” y con estos sentimientos Ocampo “vio la prolongación de su vida, la supervivencia de su espíritu, la afinidad de su pensamiento. Padre e hija fueron a partir del día del encuentro una misma cosa”, explica José C. Valadés, biógrafo de Ocampo. 
Don Melchor procreó otras tres hijas con las que mantenía una buena relación: Petra, Julia y Lucila ­-de esta última no se sabe la identidad de la madre-. Pero la conexión que tenía con Josefa era especial, con ninguna de las otras hijas podía hablar de política, de ideologías, de libros y de autores como con ella. 
Como figura clave de la Reforma, Josefa se mantuvo cerca de su padre no sólo en sus cargos políticos, sino también en situaciones no tan satisfactorias. Cuando fue desterrado por Santa Anna, Ocampo partió a Tulancingo y por no querer preocupar a sus hijas, inventó que tendría que salir a un viaje de negocios. ¿Cómo se le ocurrió semejante idea? Había preferido mentir y casi sufrir otra separación que decir la verdad sobre su destierro. Sin embargo, a pocos días de su exilio a Estados Unidos se dio cuenta que solo eran necesarias unas cuantas líneas escritas para tener a lado a Josefa. Así, en enero de 1854 desembarcaron en Nueva Orleans. 
Está clara hasta ahora, la manera en que sufría don Melchor cuando estaba separado de Josefa. En 1856, sobrellevó una nueva angustia familiar cuando tuvo la noticia de que su hija se casaría con José María Mata. No dudaba del buen juicio de su primogénita, pues ella nunca callaba ni las virtudes ni los defectos de ninguna persona; además, Mata era un hombre de rectas costumbres y buenos principios. Entonces, si no era el novio, ni el matrimonio, ¿qué le afligía a Ocampo? Nuevamente era la idea de un distanciamiento, el miedo de perder a la mujer con quien compartía cada momento de su vida. 
El 19 de septiembre de 1856, en su hacienda en Pomoca se celebró el matrimonio. Fue un minuto desgarrador en el que Ocampo entregó a su hija, nadie lo había visto llorar nunca y en ese momento no podía desprenderse, ni de su hija, ni de sus lágrimas. 
Al año siguiente, Josefa dio a luz a una niña: Josefina. Por otro lado, la guerra de Reforma comenzaba (1858) y las noticias que se tenían entre padre e hija, eran sólo a través de cartas. Los siguientes años fueron de pérdidas para Josefa, primero su nana Ana María Escobar (hasta el momento no sabía que ella era su verdadera madre); después murió su segunda hija, Mariana. Mediante sus cartas, le transmite a su padre la depresión que sufría en esos momentos. 
Por último, el momento más doloroso en la vida de Josefa: el asesinato de su padre en junio de 1861. Le escribió un poema titulado “Horas de Tristeza” en donde cuenta su infancia alejada de una figura paternal, la manera en que cambió su vida al conocerlo y el sufrimiento en el que se encontraba. “Una parte de mi ser estará en la tumba, y tu muerte me relacionará con la eternidad y con el dolor.”


Doña Francisca Javiera Tapia
De sus padres no se sabe nada. Se dice que desde pequeño lo adoptó su madrina de bautizo, doña Francisca Javiera Tapia, rica hacendada, quien hizo las veces de padre y madre y se encargó de su educación; a la postre fue quien le dejó importantes propiedades y bienes, suficientes para su manutención. Estudió en Morelia y posteriormente se trasladó a la ciudad de México, donde cursó la carrera de abogado. En el año de 1840 emprendió un viaje a Europa, particularmente a Francia, radicando algún tiempo en París. Hombre de gran cultura, filósofo, estudioso de las ciencias naturales –su gran pasión–, escribió un libro intitulado Viaje de un mexicano a Europa. De regreso a México figuró como diputado por Michoacán para luego ser electo gobernador de su entidad natal en 1846. Durante la administración del presidente Manuel Arista fue senador y secretario de Hacienda, al igual que lo fue en el gobierno del general Herrera, para nuevamente ocupar el cargo de gobernador de Michoacán, el que dejó al ser obligado a expatriarse por la dictadura de Santa Anna a la ciudad de Nueva Orleáns, donde entabló amistad con Benito Juárez, Ponciano Arriaga y José María Mata, con quienes formó la Junta Revolucionaria que desde el exilio coadyuvó con el levantamiento para derrocar a Santa Anna, el cual cristalizó en la revolución de Ayutla, encabezada por Juan N. Álvarez, en marzo de 1854. Melchor Ocampo fue enjuiciado someramente a morir fusilado y la sentencia se cumple el 3 de Junio de 1861.  Contaba con 47 años de edad al momento de su ejecución en la hacienda de Catelgo cerca de Tepeji del Rìo, habiendo colgado después su cuerpo de un enorme y alto árbol.

En su testamento dice:





Me despido de todos mis buenos amigos y de todos los que me han favorecido en poco o en mucho y muero creyendo que he hecho por el servicio de mi país cuanto he creído en conciencia que era bueno… Lego mis libros al Colegio de San Nicolás, de Morelia, después de que mis señores albaceas y Sabás Iturbide tomen de ellos los que gusten.






OBRAS DE MELCHOR OCAMPO




Ley Ocampo. 

Se prohibió el cobro de derechos y obvenciones parroquiales, que hasta entonces exigían los sacerdotes a los pobres.



Ley Lafragua. 


El principio de la Ley Lafragua manifiesta que ninguna persona podría ser molestada por sus opiniones, ya que todo ciudadano tiene derecho a imprimirlas y circularlas sin censura ni pago de fianza. 





"Ley de Matrimonio Civil" que contiene 31 artículos. En el artículo 15º a manera de formalización ceremonial del matrimonio se incluyó la famosa epístola atribuida a Melchor Ocampo, la cual figura a continuación:




Declaro en nombre de la ley y de la Sociedad, que quedan ustedes unidos en legítimo matrimonio, con todos los derechos y prerrogativas que la ley otorga y con las obligaciones que impone; y manifiesto: "Que éste es el único medio moral de fundar la familia, de conservar la especie y de suplir las imperfecciones del individuo que no puede bastarse a sí mismo para llegar a la perfección del género humano. Que éste no existe en la persona sola sino en la dualidad conyugal. Que los casados deben ser y serán sagrados el uno para el otro, aún más de lo que es cada uno para sí. Que el hombre cuyas dotes sexuales son principalmente el valor y la fuerza, debe dar, y dará a la mujer, protección, alimento y dirección, tratándola siempre como a la parte más delicada, sensible y fina de sí mismo, y con la magnanimidad y benevolencia generosa que el fuerte debe al débil, esencialmente cuando éste débil se entrega a él, y cuando por la sociedad se le ha confiado. Que la mujer, cuyas principales dotes son la abnegación, la belleza, la compasión, la perspicacia y la ternura, debe dar y dará al marido obediencia, agrado, asistencia, consuelo y consejo, tratándolo siempre con la veneración que se debe a la persona que nos apoya y defiende, y con la delicadeza de quien no quiere exasperar la parte brusca, irritable y dura de sí mismo. Que el uno y el otro se deben y tendrán respeto, deferencia, fidelidad, confianza y ternura, y ambos procurarán que lo que el uno se esperaba del otro al unirse con él, no vaya a desmentirse con la unión. Que ambos deben prudenciar y atenuar sus faltas. Que nunca se dirán injurias, porque las injurias entre los casados, deshonran al que las vierte, y prueban su falta de tino o de cordura en la elección, ni mucho menos se maltratará de obra, porque es villano y cobarde abusar de la fuerza. Que ambos deben prepararse con el estudio y amistosa y mutua corrección de sus defectos, a la suprema magistratura de padres de familia, para que cuando lleguen a serlo, sus hijos encuentren en ellos buen ejemplo y una conducta digna de servirles de modelo. Que la doctrina que inspiren a estos tiernos y amados lazos de su afecto, hará su suerte próspera o adversa; y la felicidad ó desventura de los hijos será la recompensa ó el castigo, la ventura ó la desdicha de los padres. Que la sociedad bendice, considera y alaba a los buenos padres, por el gran bien que le hacen dándoles buenos y cumplidos ciudadanos; y la misma, censura y desprecia debidamente a los que, por abandono, por mal entendido cariño, ó por su mal ejemplo, corrompen el depósito sagrado que la naturaleza les confió, concediéndoles tales hijos. Y por último, que cuando la sociedad ve que tales personas no merecían ser elevadas a la dignidad de padres, sino que sólo debían haber vivido sujetas a tutela, como incapaces de conducirse dignamente, se duele de haber consagrado con su autoridad la unión de un hombre y una mujer que no han sabido ser libres y dirigirse por sí mismos hacia el bien."





Su libro: El viaje de un mexicano a Europa, habla de el viaje que hizo cuando realizò sus estudios en Parìs.


Trailer oficial de la película







Comentarios

  1. SI EN LAS INSTITUCIONES EDUCATIV AS, EN LA ACTUALIDAD PUDIERAN LEER LOS NIÑOS UNA VEZ AL MES DESDE EL TERCER GRADO HASTA EL SEXTO GRADO, LA VIDA BREVE COMO ESTA DE MELCHOR OCAMPO, APLASTARIAMOS EN GRAN PARTE LA IGNORANCIA DE NO SABER QUIERES FUERON NUESTROS PATRICIOS Y FORMADORES DE LA PATRIA, DE NUESTRAS LEYES, SERIAN UN PROMEDIO DE 50 BIOGRAFIAS CORTAS EN CUATRO AÑOS ESCOLARES..

    ResponderEliminar
  2. SERIA IMPORTANTE LEER A LOS HIJOS, LA HISTORIA DE MEXICO Y NUESTROS HEROES, ENRIQUECERLOS Y DARLES EJEMPLO PARA QUE SEAN NUESTROS MENSAJEROS, ASI MISMO EXIJIR A LOS PROFESORES MAS CONOCIMIENTO EN SUS AREAS, YA QUE ACTUALMENTE LA EDUCACION NO ESTA AL NIVEL QUE REQUIERE EL PAIS DONDE VIVIMOS. ASI QUE COMO PADRES DEBEMOS COMENZAR POR NUESTRA CASA.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ciertamente la educación inicia en casa y como padres de familia debemos estar obligados a hablar con nuestros hijos de historia y otras cosas más...

      Eliminar
  3. Se produjo una película que se llama "Los Huérfanos"...que ilustra la vida de Melchor Ocampo...para que niños, jóvenes y adultos puedan darse cuenta de la vida y obra.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es, incluso hubo un foro donde se habla acerca de la historia de Ocampo, con historiadores que han investigado acerca de su vida, de hecho la película que mencionas es analizada en esa asamblea, puedes encontrarla en YouTube como; Foro bicentenario del Nacimiento de Melchor Ocampo.

      Eliminar

Publicar un comentario

Gracias por sus comentarios...

Entradas populares de este blog

¿CÓMO CELEBRAMOS UN CUMPLEAÑOS EN MÉXICO Y EN OTROS PAÍSES?

24 DE OCTUBRE "DÍA DE LAS NACIONES UNIDAS"

LA SONRISA DE UN MILLÓN DE DOLARES